lunes, 30 de noviembre de 2009

LA TRISTE HISTORIA DE LA FANATICA AL BEIS


Susan Finkelstein, de 42 años de edad, estadounidense, alta, de facciones muy lindas con un busto prominente y de figura sugestiva, decidió cumplir el sueño propio y el de su marido de asistir a la Serie Mundial de béisbol a ver al equipo de sus amores Philadelphia contra los New York Yankees. Los problemas económicos acuciaban a la fanática pareja, pero ella impulsada por la pasión decidió publicar un aviso en la página Carigslist que decía así: "Aficionada de corazón a los Filis -preciosa, alta, con mucho busto, rubia- está desesperada por dos boletos de la Serie Mundial. Precio negociable -¡soy creativa! ¡Tal vez podamos ayudarnos mutuamente!". Susan se autodefinió como “Muy Creativa”, característica de las que nadie duda, pero e le podría sumar algunas mas tales como ansiosa, apasionada, acelerada, impulsiva, desesperada y descontrolada fanática que no amerito, que su proceder la haría pasar de la “Pasión a la Prisión”. Después de detectar el anuncio las autoridades policiales enviaron un agente encubierto, que se mostró dispuesto al bizarro canje, “La Fanática” se mostró complacida y combinaron lugar de encuentro, una vez allí y con todas las pruebas irrumpieron los uniformados y trasladaron a Susan al departamento de policía, según publica la NBC. Hasta donde se sabe la Finkelstein, no consiguió el trueque, ella quedo detenida bajo los cargos de prostitución y ni siquiera pudo ver el partido por televisión.

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